Elvine no dispone de instalaciones de fabricación propias, pero trabaja en estrecha colaboración con un pequeño grupo de proveedores y socios cuidadosamente seleccionados, la mayoría de los cuales han asumido compromisos a largo plazo. Este planteamiento estratégico les ha permitido mantener sus principios éticos de forma coherente, ya que sus socios se alinean con sus valores y cumplen las normas internacionales.
Son plenamente conscientes de que sus responsabilidades en materia de derechos humanos, medio ambiente y asuntos sociales se extienden a lo largo de toda la cadena de valor. Por eso, a la hora de seleccionar nuevos socios, firman un acuerdo de Código de Conducta mutuo, que incluye ámbitos como las condiciones laborales, los derechos humanos y las responsabilidades medioambientales y sanitarias.