La ropa vieja recogida se clasifica manualmente por colores en Marruecos, tras lo cual se fibrosa y se convierte en un nuevo tejido. Un tejido puede reciclarse un máximo de cuatro veces. Después, la fibra es demasiado pequeña para convertirla en un tejido nuevo, pero las fibras más pequeñas pueden afieltrarse. Be The Fibre afieltra las telas residuales en posavasos, que las empresas pueden personalizar con su logotipo. Be The Fibre también puede personalizar productos como paraguas o bolsas de bicicleta para tus empleados.
Para las toallas de baño, Be The Fibre colabora con la organización Seatowel. Trabajan con una red de pescadores que recogen plástico del mar mientras pescan. El plástico pescado se vuelve a fundir y se hila en hilo, y junto con algodón reciclado forma hermosas toallas. Una parte de los beneficios de estas toallas se destina a “The Ocean Cleanup”.
Las bolsas para bicicletas Be The Fibre se fabrican de forma ética y ecológica en Camboya a partir de cemento y sacos de pienso para ganado. Los dos talleres y la pequeña fábrica de bolsas para bicicletas están reconocidos por la Organización Mundial del Comercio Justo. La fábrica emplea a 40 mujeres que trabajan en condiciones justas.