Lo sentimos. El Índice de esta Marca aún no se ha recalculado en 2023, puedes leer sobre la sostenibilidad de esta marca por temática más abajo. ¡Vuelve dentro de 3 meses para ver el nuevo Índice COSH!.
La producción propia permite a Atalyé controlar el proceso y garantizar la calidad de sus prendas. La marca considera importante que los clientes sepan quién ha confeccionado su vestido.
Viendo que toda la producción se realiza en los Países Bajos, podemos suponer que se hace en condiciones éticas. De hecho, los Países Bajos tienen una legislación y unas normas laborales estrictas que todo fabricante debe cumplir.
Atalyé también trabaja con tejidos “deadstock”. Se trata de tejidos sobrantes de la producción de otras empresas que no los utilizaron todos. Atalyé utiliza estas telas sobrantes para crear colecciones de edición limitada. Cuando el tejido se agota, la colección desaparece.
El modelo de confección a medida de Atalyé evita la sobreproducción y el despilfarro. La tecnología que utilizan les permite calcular con gran precisión la cantidad de tejido que se necesita para una prenda, lo que minimiza el corte y los residuos de producción.
El uso de tejidos de desecho también es muy circular, ya que Atalyé recupera materiales de calidad que, de otro modo, habrían acabado en el vertedero. Así, la empresa contribuye a evitar residuos y necesita menos materias primas nuevas para su colección.
Ocasionalmente, Atalyé también lanza colecciones limitadas. Por ejemplo, colaboraciones con diseñadores y artistas o el uso de materiales de desecho.
¿Buscas ropa que se adapte perfectamente a tu cuerpo? Descubre ahora la ropa a medida de Atalyé y descubre dónde comprar esta marca a continuación.