El taller de Atalyé se encuentra en Ámsterdam, donde tiene lugar todo el proceso, desde el diseño hasta la producción. También puede concertar una cita y dejarse caer por allí para que le hagan un escáner corporal en 3D. Después de elegir uno de los diseños, que puedes personalizar, tu compra pasa a producción.
Todas las prendas se producen en su taller de Ámsterdam o en colaboración con costureras locales. Además, Atalyé está estudiando la posibilidad de colaborar con una organización que ofrece formación a personas de origen inmigrante.
La producción propia permite a Atalyé controlar el proceso y garantizar la calidad de sus prendas. La marca considera importante que los clientes sepan quién ha confeccionado su vestido.
Viendo que toda la producción se realiza en los Países Bajos, podemos suponer que se hace en condiciones éticas. De hecho, los Países Bajos tienen una legislación y unas normas laborales estrictas que todo fabricante debe cumplir.