Kibibi

Kibi­bi nació cuan­do An via­jó a Kenia y Mala­wi con su novio hace 10 años. Allí des­cu­brió a crea­ti­vos joye­ros sin sali­da. An que­dó mara­vi­lla­da con sus bellas crea­cio­nes y se le ocu­rrió com­prar las joyas y ven­der­las en Bél­gi­ca.

Hoy, las joyas de Kibi­bi son obra de varios crea­do­res de Ugan­da que se cru­za­ron en el camino de An. Lee más sobre las his­to­rias per­so­na­les de los joye­ros afri­ca­nos en el sitio web de Kibi­bi.

Ade­más de joyas afri­ca­nas úni­cas, en Kibi­bi tam­bién encon­tra­rá la ​“colec­ción hAN­dre­ma­de”. Se tra­ta de joyas afri­ca­nas que nece­si­ta­ban un poco más de cari­ño y que An arre­gló ella mis­ma. An tam­bién fabri­ca sus pro­pias joyas con cuen­tas suel­tas de cerá­mi­ca, pie­dras natu­ra­les y papel reci­cla­do.

Las colec­cio­nes de Kibi­bi cam­bian cons­tan­te­men­te, por lo que se com­po­nen de dis­tin­tos mate­ria­les, como algo­dón, vidrio, hojas secas de plá­tano, alam­bre de cobre, metal, made­ra, … Las joyas están hechas de mate­ria­les reci­cla­dos o natu­ra­les. De este modo, An quie­re man­te­ner el impac­to eco­ló­gi­co de las joyas lo más bajo posible.

Al com­prar joyas nue­vas, An siem­pre bus­ca mate­ria­les reci­cla­dos. Entre otras cosas, encon­tra­rá pen­dien­tes cir­cu­la­res hechos con alam­bre de cobre recu­pe­ra­do de apa­ra­tos eléctricos.

Ade­más, las joyas de Kibi­bi están envuel­tas en papel kraft y las tar­je­tas de joye­ría son de papel reci­cla­do. De este modo, An inten­ta limi­tar al máxi­mo la hue­lla de sus joyas.

Los pen­dien­tes Kibi­bi se crean y dise­ñan en Áfri­ca con mate­ria­les loca­les. An com­pra las joyas direc­ta­men­te a los crea­ti­vos dise­ña­do­res de joyas de Ugan­da y man­tie­ne la cade­na de sumi­nis­tro lo más cor­ta posible. 

Kibi­bi tam­bién inten­ta evi­tar en lo posi­ble el trans­por­te inne­ce­sa­rio ven­dien­do en mer­ca­dos y tien­das físi­cas y entre­gan­do las joyas y los pro­duc­tos en bici­cle­ta. 

La gran mayo­ría de la colec­ción Kibi­bi es vega­na y, por tan­to, no con­tie­ne pro­duc­tos de ori­gen ani­mal. De vez en cuan­do encon­tra­rá algu­na joya que no es vega­na, como los pen­dien­tes de cuerno de vaca. Éstos se fabri­can en una orga­ni­za­ción de comer­cio jus­to a par­tir de res­tos de la indus­tria cár­ni­ca ugandesa.

¿Eres vegano y le das mucha impor­tan­cia al res­pe­to a los ani­ma­les? No dejes de pedir con­se­jo a An, esta­rá encan­ta­da de ayu­dar­te a encon­trar un par de pen­dien­tes que enca­jen per­fec­ta­men­te con tus valores.

Los pen­dien­tes de Kibi­bi no son sen­si­bles a las ten­den­cias y, por tan­to, son atem­po­ra­les. Ade­más, los pen­dien­tes están hechos a mano y sólo están dis­po­ni­bles en peque­ñas edi­cio­nes. Así que no hay sobre­pro­duc­ción, sino pro­duc­tos hechos con amor. Y lo que es más, ¡te per­mi­te encon­trar tu pro­pia joya única!

Kibi­bi es muy trans­pa­ren­te sobre su cola­bo­ra­ción con los fabri­can­tes loca­les de Ugan­da, ¡en el sitio web cada artis­ta tie­ne su pro­pia pági­na de infor­ma­ción! ¿Quie­res saber más sobre las joyas, los mate­ria­les o los crea­do­res? Visi­ta el pues­to de Kibi­bi en uno de los muchos mer­ca­dos y An esta­rá encan­ta­da de res­pon­der a tus preguntas.